Por Néstor Murray-Irizarry, historiador y gestor cultural
[Para Winston George]
Panamá siempre ha estado muy presente en nuestras vidas. Desde que estudiáramos en los grados primarios nos fascinaba escuchar a las maestras hablar del Canal de Panamá, de su hermosa gente y de las maravillas que se pueden apreciar en esta querida nación latinoamericana. Al pasar de los años, en nuestra adolescencia, escuchaba todos los dÃas una pegajosa canción [ ¿ un tamborito? ] que parte del coro decÃa: ! Viva, ahora, ¡viva Panamá! Winston George, el muy querido hermano panameño, seguro que se acordará.
La Local 237, como sabemos es también una gran familia latinoamericana. Muchos de sus miembros están vinculados con nuestros paÃses latinoamericanos. Uno de ellos, digno representante de toda la nación panameña, lo es Cejester Walker, nacido en la Ciudad Colón en la República de Panamá el 12 de agosto de 1941.En plena Segunda Guerra Mundial. Un ser humano muy especial, lleno de gran sabidurÃa y de simpatÃas. Callado y amable. Lo invite a dialogar y me acepto la invitación. Su padre tenÃa su mismo nombre y era un excelente chofer de camiones y su madre, Rafaela Walker era una de casa. Era una familia de tres hijos. Su niñez ‘’Fue muy buena, me crie con buenas amistades, no tenÃamos mucho, pero tenÃamos lo necesario, siempre habÃa más niños en la casa para jugar. Jugábamos trompo, bolita (canicas), béisbol, fútbol. Celebrábamos el dÃa de los Reyes, carnavales, la separación de Colombia que es en noviembre, esta celebración duraba cinco dÃas, incluÃa el dÃa de los muertos, dÃa de la bandera y el gran desfile de la ciudad de Colón. Después estudié la secundaria hasta noveno grado.
¿Qué hizo entonces?
Trabajé en la zona libre como asistente en un laboratorio de medicamentos Pfizer.
¿Qué hizo después?
Me fui a estudiar a Costa Rica. No me decidà por qué estudiar. En ese tiempo se murió mi hermano y un amigo me sugirió que me viniera a Nueva York. Para 1967 vivà en Brooklyn, trabajé en Wall Street. Trabajaba como contable. Después me trasladé a un departamento de computadoras y me quedé como dos años. En ese tiempo habÃa muchas organizaciones que defendÃan a los que no tenÃan, yo pertenecà a uno. No me gustó lo que trataban de hacer. Eran personas que habÃan estado encarcelados. QuerÃan hacer daño a la propiedad privada. Yo soy pacÃfico. Apoyábamos huelgas, buscábamos personas necesitadas a ver si las podÃamos ayudar. Dejé ese grupo.
¿Hablabas inglés?
SÃ, yo leÃa, escribÃa y hablaba bien el inglés y el español. Nuestros padres y nuestros abuelos llegaron a Panamá hablando inglés, nosotros como sus hijos aprendimos el inglés.
¿Qué hizo después?
Conseguà un trabajo en el hospital Bellevue de la Ciudad de Nueva York. Trabajaba de 3:00 pm a 7:00 p.m. en la cocina, distribuyendo comida a los pacientes. Me querÃa cambiar a realizar otras tareas. HabÃa una vacante de enfermero auxiliar. Pertenecà a la Unión 420. Trabajé ahà de 1970 a 1972. Después me enteré que habrÃa un examen para radiologÃa y lo tomé. Después de una semana me llegó un sobre donde me habÃan aceptado en la escuela de radiologÃa.
Conseguà mi licencia para trabajar como técnico en radiologÃa en 1976 en el mismo hospital. Trabajé hasta 1995. Cuando me hice técnico de radiologÃa ingresé en 1976 a la Unión 237. [Yo me mudé para el Bronx en 1975 cuando me casé con Marie. Tenemos cuatro hijos, dos de mi esposa y dos mÃos. Tenemos 5 nietos, biznietos 2]
¿Qué hacÃa en un dÃa de trabajo?
Me levantaba como a las 7:00 de la mañana caminaba cuatro cuadras, tomaba el tren y caminaba y llegaba poco antes de las 9, comenzaba a atender a los pacientes, terminé trabajando en el área de emergencias como supervisor de radiólogo desde el 1984 hasta que me retiré. Entraba a las 9 de la mañana y salÃa a la 1 de la madrugada del dÃa siguiente. Supervisaba a seis técnicos.
¿Alguien le orientó para que pudiera entrar a la Unión 237?
No, yo siempre he creÃdo en las uniones. Nos visitaba la Sra. Lundy y la Sra. Dyer Woodson a atender los problemas. Â
¿Usted fue lÃder alguna vez de la Unión?
No, pero participaba en reuniones como delegado de radiologÃa.
¿Qué tarea hacÃa como delegado?
Hablar, con un compañero, orientarlo o hablar con un supervisor. HabÃa muchas personas que no estaban en el fondo de retiro. HabÃa que orientarlos para que se inscribieran.
¿Cuántos años ha pertenecido a la Unión?
Siempre he pertenecido a la unión, primero a la 420 y luego a la 237. Llevo 26 años perteneciendo a la unión.
¿Cuándo se jubiló?
1995
¿Cuál es la importancia de pertenecer a un sindicato?
Se hizo para obtener y mantener los beneficios que hemos conseguido a través de los años. Los dÃas de enfermedad, el salario, las condiciones de trabajo. Proteger al trabajador. Mejorar sus condiciones de vida, de salud.
La Unión 237 me ha ayudado mucho, dentro del trabajo y fuera del trabajo.
¿Qué edad tiene ahora?
77 años de edad.
¿Qué edad tenÃa cuando se jubiló?
De la ciudad casi a los 55 entonces trabajé un tiempo en el Bronx, con Veteranos como técnico radiólogo, como diez años más.
¿Qué haces como jubilado?
Reuniones con mis familiares
¿Qué piensas de la emigración tuya y de otras personas latinas?
En los años 60 y 70, se podÃa avanzar si te lo proponÃas. Era muy importante irse superando para retirarse con buenos sueldos. Los que vinieron después han tenido que luchar más. Hoy las cosas han cambiado. Hay mucha inseguridad.
[Reprint from Retiree News & Views May/June 2019]